57.1K Seguidores El Procurador General de la Nación pidió agravar la condena contra Cristina Fernández de Kirchner a 12 años

“La causa es conocida como Vialidad. El Tribunal Oral Federal condenó a Cristina Fernández de Kirchner a la pena de seis años de prisión por el delito de defraudación en perjuicio del Estado Nacional”, explicó Jorge Monastersky. Sin embargo, el fiscal de juicio había solicitado una condena más severa: “También que se extienda los delitos de asesoría ilícita con una pena de 12 años”.

Se pidió elevar la condena de Cristina Fernández a 12 años
A su vez, detalló que ese pedido no fue tomado por el Tribunal Oral, pero ahora fue retomado por el Procurador General: “El mismo Procurador General, el doctor Casal, pidió que se extienda a 12 años, tal cual se había pedido por los fiscales, y pidió también que se revoque esa absolución de esos imputados”.

La instancia actual en la Corte Suprema fue habilitada mediante un recurso de queja, la última vía legal disponible para revisar el fallo: “Es la última oportunidad que tiene la Corte para analizar este caso. Hay que ver si lo admite y si está de acuerdo con la concepción, con la naturaleza del delito que pide el Procurador”.

El rol de la Corte Suprema
Además del pedido de pena, la Corte Suprema deberá pronunciarse sobre otras cuestiones. “Se hace lugar a dos accesorias, que es la expropiación de bienes por un monto alrededor de los 5.000 millones, y también para que se unifiquen las condenas de los delitos en juego y se le aplique la pena a los imputados que habían sido absueltos”, describió Monastersky.

Respecto a los fundamentos técnicos, el abogado explicó: “Hablan de que hay un desarrollo de roles, de que hubo una serie de delitos indeterminados, de que esos delitos no fueron meramente una desproducción”. Sobre la figura de asesoría ilícita, advirtió: “Es una figura resistida, hay que decirlo, muchas veces por los tribunales, por los jueces, por la propia Corte”.

Y agregó: “No se habla de la comisión de un solo delito, sino que el delito es un grupo de personas, mínimo tres, que se reúnen, que tienen una unión común para cometer una serie de delitos indeterminados, no un delito especial”. Por eso se aprobó una nueva legislación: “Para poder, de alguna manera, avanzar con lo que son o lo que se considera grupos organizados para delitos, se creó esa figura de la ley anti mafias”.