Gobierno de Trump cancela viajes a refugiados que ya tenían autorización para reasentarse en EEUU

Miles de refugiados que huyeron de la guerra y la persecución y pasaron por un proceso que en ocasiones se extendió durante años para poder empezar una nueva vida en Estados Unidos se encuentran ahora varados en diversos lugares del mundo. Entre ellos hay más de 1.600 afganos que colaboraron en las operaciones bélicas estadounidenses, así como familiares de militares estadounidenses en activo.

El presidente Donald Trump suspendió el programa de reasentamiento de refugiados esta semana como parte de una serie de órdenes ejecutivas que endurecen las políticas de inmigración. Su decisión había dejado abierta la posibilidad para que los refugiados que habían sido seleccionados para venir a Estados Unidos y tenían vuelos reservados antes de la fecha límite del 27 de enero pudieran entrar sin problemas.

Pero en un correo electrónico con fecha del martes al que The Associated Press tuvo acceso, la agencia estadounidense que supervisa el procesamiento y la llegada de refugiados informó a su personal y a los interesados que “la llegada de refugiados a Estados Unidos ha sido suspendida hasta nuevo aviso”.

Hay poco más de 10.000 refugiados de todo el mundo que ya habían pasado por el extenso proceso de admisión para viajar a Estados Unidos y sus vuelos estaban programados para las próximas semanas, según un documento obtenido por la AP. De momento se desconoce cuántos de ellos debían llegar antes de la fecha límite.

 Gabriela se había estado preparando para recibir a sus padres, su hermano y otros familiares que ya contaban con vuelos hacia Los Ángeles desde Guatemala a principios de febrero, después de que su estatus de refugiados fue aprobado en noviembre. La familia tuvo que huir de Guatemala porque Gabriela se negó a permitir que sus hijos se integraran a una pandilla y la familia comenzó a recibir amenazas de muerte.

 
Una vez que su familia obtuvo sus boletos de avión, vendieron su casa y todas sus pertenencias, y ella había sacado un préstamo de 800 dólares para amueblar su nuevo hogar, contó Gabriela, quien pidió ser identificada únicamente por su primer nombre por temor a que algo les suceda a sus padres en Guatemala.

Luego, el martes, su vuelo fue cancelado.

“Todavía estamos en shock. No sabemos qué podemos hacer, no sabemos qué va a pasar”, declaró Gabriela, quien llegó a Estados Unidos como parte del programa de refugiados el año pasado. “Espero que algo cambie y puedan venir. Confiamos en Dios”.

Entre los afectados cuyos vuelos fueron cancelados se encuentran más de 1.600 afganos que ya habían recibido autorización para llegar a Estados Unidos como parte del programa que el gobierno de Biden estableció después de la retirada estadounidense de Afganistán en 2021.

Muchos veteranos de la guerra más larga de Estados Unidos han intentado durante años ayudar a los afganos con los que trabajaron, además de a sus familias, a encontrar refugio en su país. Muchos estaban preparados para una suspensión del programa de reasentamiento, pero tenían la esperanza de que hubiera una consideración especial con los afganos.

 
“La pausa temprana del gobierno de Trump en los vuelos de refugiados es alarmante, y está dejando a miles de aliados afganos con miedo e incertidumbre”, dijo Shawn VanDiver, un veterano de la Marina y líder de #AfghanEvac, una coalición que apoya los esfuerzos de reasentamiento de afganos. “Estamos listos para asociarnos para solucionar esto y urgimos una comunicación clara con las familias afectadas. Honremos nuestras promesas y mantengamos los valores de Estados Unidos”.

Existe otra vía —el programa de visa de inmigrante especial— específicamente para afganos que trabajaron directamente con el gobierno de Estados Unidos. El grupo de VanDiver dijo que este programa, establecido por el Congreso, de momento no parece haber sufrido cambios.

 
El senador Chris Coons, un abierto defensor en el Congreso de los reasentamientos de afganos, dijo que era “desgarrador” ver como se rechazaba de último minuto a los afganos cuyo proceso ya estaba en las etapas finales.

“Una suspensión en un programa como este tiene enormes consecuencias para personas reales que tomaron riesgos para estar de nuestro lado en nuestra guerra en Afganistán durante más de 20 años”, dijo el demócrata por Delaware.

La orden ejecutiva que firmó Trump el lunes fijó al Departamento de Estado un plazo de una semana antes de comenzar a suspender todos los procesamientos y viajes. Ahora parece que se adelantó la fecha, aunque de momento se desconoce cuál fue el motivo del cambio.

El Departamento de Estado remitió todas las preguntas a la Casa Blanca, la cual no respondió de inmediato a una solicitud en busca de comentarios.

El representante republicano Brian Mast, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes y veterano de guerra, dijo a la AP que el gobierno de Trump había pausado intencionalmente la llegada de los afganos que ya habían sido autorizados para reasentamiento, argumentando “dudas sobre el proceso de revisión de estos individuos”.

Los críticos han encontrado fallas en la verificación y revisiones de seguridad por parte del gobierno de Biden de aquellos que intentan reasentarse en Estados Unidos.

Sin embargo, la orden de Trump decía que el programa de refugiados quedaría suspendido debido a que las ciudades y comunidades se han visto extenuadas por los “niveles récord de migración” y no tenían la capacidad para “absorber a grandes cantidades de migrantes, y en particular, refugiados”.

Las agencias que ayudan a los refugiados a establecerse y adaptarse a la vida en Estados Unidos y muchos veteranos que trabajan para ayudar a evacuar a los afganos aseguran que los refugiados son algunos de los inmigrantes que pasan por más procesos de revisión y en ocasiones deben esperar durante años antes de poner un pie en Estados Unidos.

“Los refugiados pasan por uno de los procesos de evaluación más rigurosos del mundo, y muchos ahora ven que sus viajes fueron cancelados apenas días, o incluso horas, antes de que se dispusieran a comenzar sus nuevas vidas en Estados Unidos”, dijo Krish 0’Mara Vignarajah, director de Global Refuge, una de las 10 agencias de reasentamiento de Estados Unidos, en un comunicado dado a conocer el miércoles.

Los refugiados se distinguen de las personas que llegan directamente a la frontera entre Estados Unidos y México con el objetivo de eventualmente solicitar asilo en Estados Unidos. Los refugiados deben estar viviendo fuera de Estados Unidos para ser considerados para el reasentamiento y generalmente son referidos al Departamento de Estado por las Naciones Unidas.

Mientras que el programa de reasentamiento ha disfrutado históricamente de apoyo bipartidista, el primer gobierno de Trump también detuvo temporalmente el reasentamiento y luego redujo el número de refugiados que podrían entrar cada año al país.

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Salomón informó desde Miami. La periodista de Associated Press Ellen Knickmeyer, en Washington, contribuyó con este despacho.